19 de julio de 2024
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Las bridas para tuberías son un método común de conexión de tuberías. La junta, los pernos y la brida de la tubería son los tres componentes esenciales de estos acoplamientos. Funcionan con diferentes tipos de medios, niveles de presión e industrias. Las bridas pueden unir componentes como válvulas, contenedores y tanques, o pueden unir tuberías dentro de un sistema. Mantienen la presión y el flujo al mismo tiempo que brindan una conexión directa. En esta página, se examinan las variedades de bridas para tuberías más utilizadas, así como sus aplicaciones y ubicaciones habituales.
¿Cómo funcionan las bridas de tubería?
Las bridas se utilizan para conectar tuberías, válvulas, accesorios y piezas de presión en el sistema de plomería. Las juntas entre los dos componentes evitan que se produzcan fugas, mientras que los pernos los mantienen unidos. Se puede utilizar una conexión roscada, una soldadura o un extremo de conexión para unir la tubería a la brida.
Tipos de bridas para tuberías estándar
La rosca macho de una tubería y la rosca hembra dentro de la brida se utilizan para conectar bridas roscadas. Aunque normalmente no es necesario soldar, puede reforzar la conexión. Para detener fugas en áreas no soldadas, utilice sellador líquido o cinta para roscas. Para aplicaciones de baja presión y baja temperatura, como aire comprimido y agua, estas bridas son perfectas. Son necesarias en lugares donde la soldadura es riesgosa y existe un alto riesgo de explosiones, como las gasolineras.
Para soldar una tubería, una brida con cuello de soldadura tiene un cubo cónico largo. Gracias a su flujo sin restricciones y al uso en aplicaciones de alta presión a temperaturas altas y bajas, reduce los problemas de turbulencia, erosión y corrosión. Para soportar todo el peso, una soldadura a tope en forma de V de penetración completa une la tubería y la brida.
Son comparables a las bridas con cuello para soldar, pero con el cuello extendido y no cónico, lo que sirve como una extensión del orificio. Se utilizan en aplicaciones de alta temperatura y alta presión, como las de los sectores petroquímico, petrolero y de gas. Las tuberías de agua y los sistemas de tuberías industriales emplean estas bridas porque pueden soportar mayores presiones.
Con excepción de la rosca interna, las bridas deslizantes se parecen a las bridas roscadas. Dos soldaduras de filete, una dentro y otra fuera de la brida, mantienen la tubería en su lugar. Antes de soldarla en su posición, la tubería se desliza dentro de la brida.
Se utilizan principalmente para tuberías de diámetro pequeño y alta presión. Una soldadura de filete resistente fuera del casquillo mantiene la tubería en su lugar mientras se desliza hacia la brida. Estas bridas no son adecuadas para lugares muy corrosivos porque se requiere un espacio de expansión entre el extremo de la tubería y el hombro para evitar la corrosión por grietas.
En tuberías de aleación de níquel o acero inoxidable, las bridas con juntas a tope reducen el costo de las conexiones. La brida en sí puede estar hecha de un material menos costoso, como acero al carbono, ya que siempre se utiliza con extremos cortos, que coinciden con el sistema de tuberías. Para mayor robustez, la tubería puede soldarse a tope en su lugar.
Las bridas ciegas facilitan el acceso a las tuberías para realizar tareas de mantenimiento sellándolas o cerrándolas. Sobre ellas se montan juntas planas de tipo cara.
Diferentes tipos de bridas
Materiales típicos para bridas de tuberías
Las bridas fabricadas en acero al carbono ofrecen cualidades mecánicas y químicas superiores. Proporcionan una excelente resistencia química, alta tenacidad, alta resistencia y una resistencia a la fatiga excepcional. Son perfectas para unir tuberías, ya que también tienen una alta resistencia a la corrosión bajo tensión.
En comparación con el acero al carbono, el acero aleado tiene mayores concentraciones de molibdeno y cromo, por lo que es perfecto para aplicaciones que impliquen alta presión y alta temperatura. Además, resiste mejor la corrosión que el acero al carbono.
Como los aceros dúplex combinan las cualidades de la ferrita y la austenita, son más resistentes a la corrosión en condiciones de azufre y cloruro y más rígidos que el acero ferrítico. Es apropiado para una amplia gama de aplicaciones industriales complejas debido a sus cualidades magnéticas.
El acero inoxidable es más resistente a la corrosión porque contiene molibdeno (Mo), cromo (Cr) y níquel (Ni). La fabricación de bridas para tuberías de diversas formas y tamaños es un uso común. Vea nuestra comparación de acero inoxidable 304 y 316 para obtener más información sobre el acero inoxidable.
Las características únicas de los grados de aleación de níquel, como Inconel, Incoloy, Hastelloy y Monel, los hacen útiles para aplicaciones especializadas. Consulte nuestro artículo sobre resistencia química para obtener más información sobre las características químicas de estos materiales.
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